El castillo de la culebra, Hisn al-hans.
El cerro del castillo, por su valor estratégico, se ocupa desde tiempos antiguos. Ya en el 875, fue testigo del alzamiento de Ibn Marwan contra el emir de Córdoba Munhammad I. En ese año, la fortaleza fue sitiada por las tropas del emir durante tres meses, finalizando el asedio tras un acuerdo por el que Marwan deponía su actitud levantisca y se marchaba a otro lugar, dejando libre la fortaleza.
El castillo de Alange aparece en los primeros textos cristianos con el nombre de Hisn al-Hans o qal at al-Hans, donde se narran los hechos sucedidos en el 915. cuando Ordoño Il de León realiza una incursión a esta fortificación, ocupada en ese momento por grupos bereberes como los Baranis y los Kutama.
Nuevamente, las crónicas musulmanas se hacen eco de las operaciones bélicas que suceden en Alange en el 928, cuando las tropas de Abd al-Rahmman IIl trataron de someter a la autoridad cordobesa a un grupo de emeritenses levantiscos que permanecían encastillados en la fortaleza.
A los pies del cerro, en 1230 tendría lugar la "Batalla de Alange" que tuvo lugar entre los ejércitos cristianos que asediaban Mérida bajo el mando de Alfonso IX y las tropas cordobesas que acudieron a socorrer la ciudad y que se encontraban acampadas al amparo de la fortaleza.
En 1234 Alange caería definitivamente en manos cristianas. Fernando III cedió la fortaleza y todas las tierras del entorno a la Orden de Santiago, conformándose así la Encomienda de Alange. El castillo estuvo habitado hasta comienzos del siglo XVI, época en la que se abandona por el traslado de la sede de la Encomienda a una nueva casa que se construye ya en el casco urbano.