La construcción del embalse de Alange supuso una considerable transformación del núcleo urbano. Los principales hitos transformadores fueron, la inundación de algunas de las calles situadas más al sur de la población, la construcción de un gran dique para contener las aguas y evitar que llegaran hasta la zona del balneario y el realojo de los vecinos a los que se expropiaron sus casas en un área urbana de nueva creación al norte de la población (Barrio San José).
Como consecuencia de la construcción de la presa, en el término municipal de Alange se expropiaron 3.979,8813 Ha. de suelo rústico y 28.946,43 m² de suelo urbano del que formaban parte 65 viviendas. Las calles afectadas fueron: Calle Almendralejo, desapareció por completo (20 construcciones), Calle Nueva que perdió 13 viviendas, Calle Castillejo de la que se expropiaron y demolieron 8 viviendas, Calle Trinidad, con 40 edificios menos entre casas y corrales. A todo ello hubo que sumar una notable cantidad de cortijos, caseríos, chalets, etc. que se encontraban diseminados por los campos de Alange.